jueves, 27 de junio de 2019

Heinz Dieterich



El asombro de volver a ver y escuchar con otros oídos sobre el panel acristalado de la computadora en un programa de televisión cultural de México, bajo el nombre de Debate, a Heinz Dieterich. Maestro alemán de rostro inexpresivo, como la cara congelada de la seriedad por el tecnicismo de una cámara detenida por el tiempo más que por el espacio; algo parecida a la de Lutiger, profesor del antiguo Centro de Enseñanza de Inglés de la universidad que su sentido del humor estaba impregnado de sarcasmo con  la mirada encima del hombro. Dos rostros en común, dos lugareños de la misma nacionalidad; dos profesores universitarios, uno de la Autónoma Xochimilco, Lutiger de la Autónoma de Tabasco que no será el caso, en esta ocasión, hablar más de él.

Dieterich, el disciplinado entre todos los maestros que impartieron el curso de actualización docente en 1987 en la Universidad de Tabasco. Mi primer curso de metodología de la
investigación, basado en el libro Nueva guía de metodología de la investigación escrito por el profesor Heinz. Un libro que adquirí de inmediato y que aprecié y leí detenidamente; pero que lamenté haberlo dado prestado y perdido por un compañero de profesión que nunca más me lo regresó, cuando en mil novecientos ochenta y siete me atreví a coordinar lo aprendido en el curso de Dieterich ante compañeros profesores de la División Académica de Ingeniería y Tecnología de la universidad. A veces una expresión corporal o verbal, sujeta a nuestra percepción y por lo tanto a nuestro prejuicios de valores, dice y cuenta más que las cartas de presentación que validan el dominio cognitivo de un profesional en el proceso de enseñanza aprendizaje; aunque mi opinión a posteriori acerca del profesor Heinz iba acompañada de una cierta lucecita que dejaba ver que el león no es como se pinta o que la imagen no siempre está esbozada de mil palabras.


Tuvo que pasar una década, para volverme a encontrar al profesor Heinz Dieterich. Ahora en un diplomado, que llevaba el nombre de calidad educativa, organizado nuevamente por la Universidad de Tabasco. Ciertamente no como la primera vez, sino a través de un texto, subtitulado,  Globalización y Educación: la realidad, tomado del libro La Sociedad Global:
Educación, Mercado y Democracia, editado por Joaquín Mortiz coescrito con uno de los grandes lingüistas del siglo XX y lo que va del XXI: Noam Chomsky. En verdad, un gran texto revelador de las falacias en las ideas que el neoliberalismo vendió a los países en vías de desarrollo, especialmente a nuestro país, como la panacea a la solución de los males económicos, sociales, políticos y culturales. Tan sólo un capítulo del libro que abrió brechas a mi ingenuo e ignorante desconocimiento de lo significa la profesionalización como docente universitario, que sintetizo  en pocas líneas: 1. Que capitalismo neoliberal no podía, no pudo ni podrá garantizar la distribución de la riqueza más que para unos cuantos; una minoría privilegiada. Hoy siglo XXI, 2019, lo estamos viendo y viviendo: el incremento de la pobreza aumentó en relación  a los casi treinta y siete años de imposición del modelo económico neoliberal en México. 2. Que esta pobreza de millones de mexicanos no es producto del empleo que prometió el modelo económico (entre otros factores, hoy se dice y está comprobado: por la corrupción de los funcionarios públicos y representantes empresariales nacionales y transnacionales) sino del subempleo en el país. 3. Que los datos y tendencias empíricas de la evolución económica global en el país podían, decidieron y aún determinan  los requisitos ocupacionales de las transnacionales en este proceso las que a su vez prescriben las actuales reformas educativas en las universidades públicas de México y, con mayor incidencias en las de los Estados. 4. Requisitos  que implica, según mi subrayado en el texto mencionado, la no-utilización educativa del  enorme potencial humano [y con ello…] una grave destrucción de creatividad y talento. Sin embargo, el sistema paga este  precio, porque la función de América Latina (para nuestro caso México) dentro de la división internacional del trabajo no consiste en proveer innovaciones científico-tecnológicas —convirtiéndose en un peligroso rival en el mercado mundial— sino suministrar mano de obra barata y materias primas. Los talentos que tienen que protegerse, son los de las metrópolis, no los [… de los países en vía de desarrollo]. 5. ["La privatización de la educación superior ha impuesto cada vez, en mayor cuantía, la imposición de los estándares curriculares de eficiencia, competitividad, evaluación, etc., del Primer Mundo en América Latina, [México, verbi gracia]. Estos patrones culturales —que son esencialmente medios de dominación, no de eficientización— rigen crecientemente las formas y contenidos de enseñanza desde los niveles primarios hasta los sistemas de posgrados"].
Tal vez la globalización, producto del modelo de pensamiento neoliberal tiene alguna ventaja en el orden material, social y cultural; pero a lo largo de casi cuatro décadas ha sido más bien  para unos cuantos.
Heinz Dieterich. Verle, oír su voz y escucharle, es reconocer el eco  de un pensamiento político, social, económico y cultural que caló en aquel joven en sus inicios como profesor universitario. Hoy a la distancia, este maestro alemán-mexicano, me recuerda que, a pesar de cualquier prejuicio que me haya formado en aquel curso de metodología de la investigación, los principios son los principios y si no están construidos bajo ningún dogma: inquebrantables cimientos del pensamiento y conocimiento. De la congruencia y la honestidad.

1 comentario:

Enrique V. dijo...

Bien por esos comentarios, en particular sobre Una Oda Tropical de Pellicer, es claro, como dices, que el poema nos hace sentir que somos parte intima de la naturaleza, curiosamente, digo yo, como un helecho o mas aun y sin que se vea como chanza a un Cobit 19 y esto lo digo por esa relacion que haces entre literatura y ciencia que me parece acertada porque si no se les da a las dos la misma importancia en nuestras escuelas seguro no aguantaremos otra pandemia como esta con virus que simplemente nos llevan mas de 300000 años de ventaja en cuestión de sobrevivencia. Felicitaciones por tocar estos temas tan importantes.